Comodoro Rivadavia San Martín 725, Oficina 4
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Cuidadoras domiciliarias

Especialista en atención y acompañamiento del adulto mayor

Porque ellos siempre cuidaron de ti, es el momento de cuidar de ellos.

Contamos con un staff de cuidadoras capacitadas para cada necesidad familiar.

Brindamos servicio de acompañamiento nocturno e internación.

Tiempo promedio de búsqueda 2-3 semanas

Contrataciones part-time, full time y por horas.

¡Contactanos!

Podés solicitar información sobre nuestros servicios a través del siguiente formulario.

Nos pondremos en contacto rápidamente para asesorarte.

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¿Cómo trabajamos?

Búsqueda

Junto con la familia creamos un perfil de la cuidadora deseada y procedemos evaluar dentro del staff de nuestro equipo.

Presentación

Son presentadas a la familia las cuidadoras que han aprobado satisfactoriamente los diversos filtros de selección. Una vez conocida la propuesta la familia elige la cuidadora acorde a sus necesidades comunicadas anteriormente.

Seguimiento

A su vez realizamos seguimiento de la persona elegida durante los tres primeros meses que transcurren en la garantía, para verificar haber realizado una buena búsqueda y selección.

Perfil de nuestros Acompañantes 

Salud física

Gozar de excelente salud física ya que, debido a que el adulto mayor que necesita de los cuidados a causa de su deterioro corporal y sensorial, sus capacidades disminuyen y el especialista será su apoyo.

Autocontrol

Manejar adecuadamente las emociones, como la frustración y el enojo. Tener una noción razonablemente clara de lo que nos sucede a nosotros mismos es una obligación moral ya que saber cómo somos nos permite saber cómo influimos en los demás.

Valores

Practicar valores, como el respeto, la tolerancia y la compasión. Los mismos son fundamentales para brindar un trato humanitario al adulto mayor.

Empatía

Tener la capacidad de generar empatía, es decir, considerar la situación del adulto mayor y actuar conforme a ella.

Vocación

Sentir satisfacción en la realización de la labor de servir y ayudar al adulto mayor. La vocación nos permite sostener la tarea en el tiempo.

Generosidad

Tener una actitud generosa, el paciente requiere siempre de tiempo para la escucha, la compañía y la comprensión. Estar consciente de la importancia que tiene tu tarea con el adulto mayor.

El especialista en Acompañamiento del adulto mayor tiene como objetivo fundamental favorecer e incrementar la autonomía personal de aquel a quien acompaña

Detección de sintomas

El especialista en atención y cuidado del adulto mayor, por las características propias de su labor, puede ayudar en la detección de síntomas de alarma del estado físico y psíquico de su paciente a cargo.

En un inicio deberá centrarse en el estado de fragilidad, de la capacidad aeróbica (buen funcionamiento en corazón, vasos sanguíneos, pulmones), de la función cognitiva (inteligencia y memoria) y del estado nutricional del adulto mayor, así como la vulnerabilidad a la que pueda estar expuesto. Es decir, se debe poner atención a la fragilidad afectiva, así como a la fragilidad social, por ejemplo, aquellos que viven en una situación muy condicionada como ser situación de aislamiento social, situación económica precaria, viviendas inadaptadas, familia con conflictos generacionales, etc.

También se debe poner atención a la pérdida de funciones (físicas, cognitivas, nutricionales, afectivas y sociales) en el adulto mayor para luego, una vez que tenemos conocimiento de las limitaciones, intentar mejorar sus aptitudes y adaptarlo desde el punto de vista holístico, en relación con la integración de los diferentes elementos que conforman la vida del adulto mayor.

Tareas del cuidador

De manera general el especialista llevará a cabo diferentes tareas con la finalidad de atender a los cuidados que necesite el adulto mayor, y además favorecer el establecimiento de vínculos de buena calidad con él, entre él y otras personas. El especialista en los cuidados y atenciones del adulto mayor, teniendo en cuenta las necesidades, las limitaciones y las habilidades de cada paciente, se encargará de:

  • Asistir al adulto mayor para desplazarse dentro de la casa o la habitación dependiendo de sus posibilidades (caminar, ir al baño, entre otras).
  • Estar al tanto de la toma de medicamentos, administrárselos en tiempo y forma y adquirirlos (si fuere necesario).
  • Apoyarlo en la realización de algunas acciones elementales, como servirle un vaso con agua, acercarle la radio, pasarle una revista, etc.
  • Ayudar a monitorear el estado general de salud del adulto mayor (temperatura, estado de ánimo, etc.).
  • Informar al médico y al otro cuidador, si lo hubiere, del estado del paciente y lo que ha requerido.
  • Dar pronto aviso a las personas correspondientes en caso de que el adulto mayor sufra un agravamiento de su estado de salud, con la finalidad de que se proceda a enviar un médico para su atención.
  • Establecer actividades de acuerdo con su condición y sus intereses, como puede ser asistir a talleres, practicar juegos de mesa, leer, charlar sobre temas de actualidad o cualquier otra actividad que estimule al adulto mayor, lo mantenga atento y realizando alguna actividad de su agrado.
  • Procurar mantener buenas relaciones con los familiares del adulto mayor y mantenerlos informados sobre su situación. También promover su participación en el cuidado del adulto (en caso de que no lo hagan).
  • Asistir el adulto mayor en la alimentación considerando la dieta que necesite según sus características y, de ser necesario, encargarse de la compra de los alimentos adecuados.
  • Dar atención, aseo y cuidado personal. Esto incluye higiene, vestimenta, uso del baño...
  • Implementar cambios que prevengan accidentes.
  • Ocuparse de las necesidades del hogar, esto comprende hacer las compras, preparar la comida, encargarse de que el paciente vista ropa limpia diariamente, el uso correcto de los medios de transporte y celular.

El apoyo que brinda el especialista en cuidados y atención del adulto mayor será para cada caso diferente, ya que existen condiciones individuales de cada paciente que determinarán su situación médica general, su capacidad funcional y el entorno en el que se desenvuelve.

Vínculo entre el cuidador y el adulto mayor.

El término “vínculo”, del latín vinculum, significa “unión o atadura de una persona o cosa a otra”. Partiendo de esta definición, debemos dar cuenta cuidadosamente de la implicancia del vínculo que se construye entre el binomio cuidador- persona cuidada. Un vínculo implica la presencia de dos y, por supuesto, el reconocimiento de otro diferente y diferenciado. En ese reconocimiento está la necesidad de trabajar progresivamente en la construcción de este vínculo que supone la posibilidad de un encuentro intergeneracional que derribe estereotipos, que permita un enriquecimiento mutuo y genere un espacio genuino de acercamiento y escucha.

El vínculo se fundamenta en la relación con el otro y en las emociones que se ponen en juego. Exige empatía, es decir, ponerse en la piel del otro, explorar qué siente, qué piensa, escuchar atentamente y responder a sus necesidades con flexibilidad, aceptando sus diferencias. Pero además exige calidez y asumir que, en el cuidado, tan importante como la actividad a realizar, es la forma individuales de cada paciente que determinarán su situación médica general, su capacidad funcional y el entorno en el que se desenvuelve.

Un adulto feliz será el reflejo de una infancia feliz donde el amor, respeto, buen cuidado y alegría fueron los marcadores principales de esta Etapa y depende de nosotras junto a sus familiares prolongar esos derechos.

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